Depresión

La depresión es una experiencia negativa, displacentera y auto saboteadora que puede experimentar una persona en alguna circunstancia de su vida, sin entender sus causas y sin comprender como puede salir de ella.
Algunos de sus síntomas son:
- Fuerte bajón de energía
- Sensación de pesadez
- Creciente inmovilidad
- Momentos de ensimismamiento
- Desconexión de quienes le rodean
- Desinterés por lo que antes si importaba
- Apatía
- Pérdida del apetito
- Carencia de metas o de compromiso con ellas
- Somnolencia
- Actitud de encierro: en cama, habitación o casa
Ante la depresión las personas pueden optar por depender de algo que creen de ayuda. Por ejemplo, una medicación.

Aunque la medicación puede ayudar temporalmente la ayuda psicoterapéutica permite ahondar en las causas mentales e inconscientes que hay tras de cada depresión.

Para entender un poco la depresión es necesario considerar que los seres humanos tenemos una necesidad de reconocimiento que satisfacemos a través de comunicación gestual, verbal y en contacto físico.

Al mismo tiempo que una persona necesita este reconocimiento puede estar mentalmente bloqueada para recibirlo. El bloqueo para recibir este reconocimiento puede ir ocasionando estos bajones de energía que comúnmente son llamados depresión.

Cada persona que sufre depresión necesita buscar las causas profundas de su bajón de energía, de su desánimo y de la sensación de carencia de significado, valor e importancia personal.

Cuando una persona que está deprimida busca ayuda, puede encontrar un profesional que quiere ayudarle acudiendo exclusivamente a medicamentos.

O puede encontrarse con un experto que quiere mirar las causas emocionales, inconscientes y profundas de su sufrimiento.

Yo recomiendo el segundo tipo de profesional. Me identifico con la forma de atención que busca apoyar a la persona con la expresión de lo que nunca ha logrado poner en palabras. Es esta atención la que puede brindar beneficios a más largo plazo.

Cada persona puede cambiar por dentro antes de cambiar por fuera. Esto requiere humildad y valor para confrontarse con sus verdades interiores.

Las diferentes investigaciones han demostrado que la depresión, al ser una alteración del estado de ánimo derivado a un cambio en los receptores químicos neuronales, no sólo debe tratarse son fármacos sino también con terapia; con el fin de mejorar el proceso cognitivo conductual y mejorar la calidad de vida.
Quedarse únicamente con fármacos es depender 100% de la medicina y poco a poco se requerirá más medicamento y menos proceso cognitivo consciente.

Estimado(a) paciente

Los cambios bioquímicos son en gran parte los cuasantes de la depresión que pueden ser desencadenados por varios factores. Cualquiera sea la causa, estos cambios perturban la transferencia de información entre las células nerviosas en el cerebro y la capacidad del cuerpo para manejar el estrés, así como el estado de ánimo general. Aunque las respuestas individuales varían, los investigadores sospechan que los cambios bioquímicos en última instancia dan lugar a la tristeza abrumadora y otros sentimientos característicos sufridos por la mayoría de las personas con depresión.

Se cree que los trastornos del estado de ánimo se originan en estructuras específicas del cerebro, principalmente un área conocida como el sistema límbico, el centro emocional del cerebro. Entre otras responsabilidades, esta región (que incluye el hipocampo, los ganglios basales y la corteza prefrontal, ayuda a regular el sentido de bienestar, apetito, agresión y deseo sexual de una persona).

Los investigadores también han identificado el sistema límbico como el origen de los desequilibrios en los neurotransmisores (mensajeros químicos en el cerebro) y las hormonas. Además, los escáneres de imágenes del cerebro revelan una disminución de la tasa metabólica en los núcleos caudados y los lóbulos frontales de los pacientes deprimidos (esta tasa vuelve a la normalidad con la recuperación). La implicación de estos hallazgos, sin embargo, no se entiende completamente.

Algunos suplementos aunque no ayuden directamente a los mismos pueden compensar deficiencias por ejemplo la vitamina B unicamente cambiara el metabolismo energético y la niacina solo controla las grasas y acidos, le recomiendo de manera muy especial siempre tratarlo con psicofarmacos ISRSS un diagnostico oportuno podria ayudarla a conllevar un estilo de vida positivo, adicionele a esto una dieta rica en serotonina y ejercicio fisico diario, con complementos fundamentales para la superacion de la patologia.

La depresión es una alteración severa del estado de ánimo, siempre acompañada de grandes cambios tanto en la química del cerebro como en nuestro comportamiento. Debe tratarse de 2 formas: con fármacos indicados por un psiquiatra y terapia cognitivo-conductual proporcionada por un psicólogo especializado en esa corriente. La vitamina sólo producirá un efecto placebo, te sugiero buscar la ayuda de estos profesionales para que aproveches los avances de estas disciplinas y puedas superar el problema.

Cuando existen síntomas por depresión, se observa si es endógena o exogena, depende de varios factores, endógeno: depende de factores genéticos, existen antecedentes que data de un tiempo especificado; exogena: cuando se da por factores externos, una separación, un duelo, una situación social o laboral difícil, etc... en ese orden de ideas tu pregunta tiene que ver con lo endógeno, lo biológico, en ese caso puedes acudir a un psiquiatra o médico quien te dará una respuesta precisa, son los especialistas que tratan dichos temas químicos.

Te recomiendo consultar un especialista si es tu caso de tratamiento de la depresión. Inicialmente puedes solicitar cita psicológica y el profesional determinará si se requiere remitir a psiquiatría para medicación.
La depresión debe valorarse si es un solo episodio o un trastorno depresión mayor.
Sugiero una terapia cognitiva conductual en este caso.